LA OVINOCULTURA Y LA CAPRICULTURA
UNA OPCIÓN FRENTE AL TLC

El desarrollo agropecuario del país ha logrado que cada año se incrementen las áreas disponibles para la explotación pecuaria, más sin embargo se insiste en la necesidad de la sostenibilidad ambiental, hecho que hace necesario conocer la etología de las especies con el fin de determinar cual de ellas nos conviene más.
Las cabras y las Ovejas poseen la gran ventaja de ser especies con grandes facilidades de consumo de material silvestre, por lo que el empleo de técnicas de producción como el silvo pastoreo, crea la posibilidad de aprovechar al máximo la estructura de las zonas de difícil acceso a la ganadería mayor.

Entonces el proceso productivo tiene una gran ventaja en la disminución de costos, para lo cual el desarrollo del manejo y la capacitación tecnológica se hace mucho mas acentuada hacia el entendimiento de la agro ecología que lo afecta. Al hacer énfasis en el desarrollo de la producción Colombia es un país con un alto potencial productivo, destacado por su área de producción y su carácter tropical, comparado con Nueva Zelanda que posee cerca de tres veces menos tierras empleadas para praderas y pastos permanentes.

La comparación entre Nueva Zelanda y Colombia es dada por que este país es el segundo país con mayores índices de exportación de carne Ovina y Caprina en el mundo con más de 357.000 toneladas métricas/año y posee cerca del 32% de la capacidad forrajera que posee Colombia, lo cual hace de nuestro país un potencial muy alto para el desarrollo de la producción Ovina y Caprina.